Calmar sus picores y sus irritaciones
¡Pica!
Los animales tienen tendencia a rascarse, es un comportamiento normal siempre y cuando se mantenga dentro de los límites de lo razonable. No obstante, tan pronto como se produzca un enrojecimiento, una pérdida de pelo excesiva, una sequedad o un olor rancio, es importante consultar al veterinario para identificar la causa de ese picor. Tu veterinario establecerá entonces un tratamiento apropiado.
Causas diversas
Parásitos:
Pulgas y garrapatas
Sarna, Jejene
Infecciones:
Bacterias
(pioderma...)
Hongos
(Malassezia...)
Alergias:
Dermatitis atópica
Alergia alimentaria,
a las picaduras de las pulgas
o de contacto
Trastornos de
la conducta, etc...: Ansiedad, estrés
1. ¡Calmar el fuego!
Aunque rascarse proporciona un alivio inmediato, es únicamente una mejoría temporal. Muy rápidamente, el picor aumenta y se crea un círculo vicioso. Se recomiendan soluciones naturales complementarias a la medicación para ayudar a aliviar a tu mascota y romper el círculo vicioso.
2. Hidratar y reforzar su barrera cutánea
Los picores son el primer signo de una piel con tendencia alérgica que se caracteriza por:
- Una barrera cutánea dañada que hace que la piel sea muy seca y sensible
- Una piel hipersensible a los alérgenos
Crema fluida
hidratante
Zonas muy secas – Enrojecimiento – Pieles alérgicas / atópicas
3. Elige un cuidado limpiador adecuado
- Para eliminar los alérgenos de la superficie de la piel
- Para ayudar a aliviar los picores
Espuma limpiadora y calmante sin aclarado
Picor – Enrojecimiento – Pieles alérgicas / atópicas
Toallitas calmantes
Zonas de difícil acceso: pliegues, espacios interdigitales, etc.